Que te quería
Que hoy te veo
Y aunque lo intente no se me olvida
Que eras tú el que no creía en las despedidas
Que sigo siendo la misma loca que entre tus sábanas se perdía,
Y a fin de cuentas no soy distinta de aquella idiota.
Que te quería...
Cuando ya perdiste completamente la fe y comenzas a pensar en que estas perdido, ninguna palabra te consuela. No hay consejo que te ayude, no hay nadie que te pueda devolver la esperanza y las ganas de seguir. Porque llegas a un momento en donde tu cabeza se colapsa de tantas emociones y no eres capaz de sentirte bien. Buscas consuelo en todas partes pero ya no existe. Estas cansada de darte la cabeza contra la pared, estás cansada de tener que caerte y levantarte sola, porque todos creen que eres "fuerte". Y nadie se da cuenta de que esa fortaleza solo es una ilusión.
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